martes, 5 de marzo de 2019

como se instala un tomacorriente polarizado

 Tomacorriente polarizado: Este tomacorriente se caracteriza por tener tres puntos de conexión, el de fase, vivo o positivo, el neutro o negativo y el de tierra fisica, es muy importante el uso de estos tomacorrientes. A la derecha un ejemplo de la espiga que se utiliza.

Para la instalación de un tomacorriente se debe de desmontar el toma anterior quitando los tornillos que aseguran el tomacorriente a la caja, luego, aflojar los tornillos que aseguran los cables y colocar el nuevo. Si es una instalación nueva, primero debemos de colocar los cables dentro del tubo y proceder como se hizo con los interruptores, ver Interruptor simple e Interruptor múltiple. En el caso de los tomacorrientes los cables se conectan al positivo y negativo de la instalación directamente.
 En la figura puede verse que debemos de conectar tres cables para instalar un tomacorriente polarizado:
CAFÉ, NEGRO O GRIS: Este debe de conectarse a la línea de fase, viva o positiva de la instalación eléctrica.
AZUL O BLANCO: Este debe de conectarse a la línea neutra o negativa de la instalación eléctrica.
VERDE O VERDE CON AMARILLO: Este corresponde a la tierra física instalación eléctrica. NOTA: ver  arriba del código de colores.
En el caso de un tomacorriente no polarizado se deben de conectar dos cables:

ROJO: Este debe de conectarse a la línea viva o positiva de la instalación eléctrica.
NEGRO: Este debe de conectarse a la línea negativa de la instalación eléctrica.
Para una instalacion nueva seguir los pasos indicados en Interruptor simple e Interruptor múltiple.

No hemos utilizado símbolos para estos casos ya que lo que se pretende es enseñar de forma simple como instalar tomacorrientes. Esperamos que este tutorial sea de utilidad para los estudiantes y personas que deseeen hacer sus propias instalaciones eléctricas.
Resultado de imagen para estructura de un tomacorriente polarizado

corriente nominal

La potencia nominal es la potencia máxima que demanda una máquina o aparato en condiciones de uso normales; esto quiere decir que el aparato está diseñado para soportar esa cantidad de potencia, sin embargo debido a fluctuaciones en la corriente, al uso excesivo o continuo, o en situaciones de uso distintas a las del diseño, la potencia real puede diferir de la nominal, siendo más alta o más baja.
 Resultado de imagen para corriente nominal

fuentes de poder

Cuando se habla de fuente de poder, (o, en ocasiones, de fuente de alimentación y fuente de energía), se hace referencia al sistema que otorga la electricidad imprescindible para alimentar a equipos como ordenadores o computadoras. Generalmente, en las PC de escritorio, la ya citada fuente de poder se localiza en la parte posterior del gabinete y es complementada por un ventilador que impide que el dispositivo se recaliente.

La fuente de poder, por lo tanto, puede describirse como una fuente de tipo eléctrico que logra transmitir corriente eléctrica por la generación de una diferencia de potencial entre sus bornes. Se desarrolla en base a una fuente ideal, un concepto contemplado por la teoría de circuitos que permite describir y entender el comportamiento de las piezas electrónicas y los circuitos reales.

La fuente de alimentación tiene el propósito de transformar la tensión alterna de la red industrial en una tensión casi continua. Para lograrlo, aprovecha las utilidades de un rectificador, de fusibles y de otros elementos que hacen posible la recepción de la electricidad y permiten regularla, filtrarla y adaptarla a los requerimientos específicos del equipo informático.
Resulta fundamental mantener limpia a la fuente de poder; caso contrario, el polvo acumulado impedirá la salida de aire. Al elevarse la temperatura, la fuente puede sufrir un recalentamiento y quemarse, un inconveniente que la hará dejar de funcionar. Cabe resaltar que los fallos en la fuente de poder pueden perjudicar a otros elementos de la computadora, como el caso de la placa madre o la placa de video.
En concreto podemos determinar que existen dos tipos básicos de fuentes de poder. Una de ellas es la llamada AT (Advanced Technology), que tiene una mayor antigüedad pues data de la década de los años 80, y luego está la ATX (Advanced Technology Extended).
La primera de las citadas se instala en lo que es el gabinete del ordenador y su misión es transformar lo que es la corriente alterna que llega desde lo que es la línea eléctrica en corriente directa. No obstante, también tiene entre sus objetivos el proteger al sistema de las posibles subidas de voltaje o el suministrar a los dispositivos de aquel toda la cantidad de energía que necesiten para funcionar.
Además de fuente AT también es conocida como fuente analógica, fuente de alimentación AT o fuente de encendido mecánico. Su encendido mecánico y su seguridad son sus dos principales señas de identidad.
La ATX, por su parte, podemos decir que es la segunda generación de fuentes para ordenador y en concreto se diseñó para aquellos que estén dotados con microprocesador Intel Pentium MMX.
Las mismas funciones que su antecesora son las que desarrolla dicha fuente de poder que se caracteriza por ser de encendido digital, por contar con un interruptor que se dedica a evitar lo que es el consumo innecesario durante el estado de Stand By y también ofrece la posibilidad de ser perfectamente apto para lo que son los equipos que están dotados con microprocesadores más modernos.
 Fuente de poder

fusibles

En la electricidad, se denomina fusible a un dispositivo constituido por un soporte adecuado y un filamento o lámina de un metal o aleación de bajo punto de fusión que se intercala en un punto determinado de una instalación eléctrica para que se funda (por efecto Joule) cuando la intensidad de corriente supere (por un cortocircuito o un exceso de carga) un determinado valor que pudiera hacer peligrar la integridad de los conductores de la instalación con el consiguiente riesgo de incendio o destrucción de otros elementos.

El fusible eléctrico, denominado inicialmente aparato de energía y de protección contra sobrecarga de corriente eléctrica por fusión, es el dispositivo más antiguo de protección contra posibles fallos en circuitos eléctricos, apareciendo las primeras citas bibliográficas en el año 1774, momento en el que se le empleaba para proteger a condensadores de daños frente a corrientes de descarga de valor excesivo. Durante la década de 1880 es cuando se reconoce su potencial como dispositivo protector de los sistemas eléctricos, que estaban recién comenzando a difundirse. Desde ese momento, hasta la actualidad, los numerosos desarrollos y la aparición de nuevos diseños de fusibles han avanzado al paso de la tecnología, y es que, a pesar de su aparente simplicidad, este dispositivo posee en la actualidad un muy elevado nivel tecnológico, tanto en lo que se refiere a los materiales usados como a las metodologías de fabricación. El fusible coexiste con otros dispositivos protectores, dentro de un marco de cambios tecnológicos muy acelerados que lo hacen aparecer como pasado de moda u obsoleto, lo que no es así.
Este concepto se entiende con mayor facilidad cuando se describe el campo de aplicación actual, cuyos parámetros nominales poseen rangos muy amplios. Las tensiones de trabajo van desde unos pocos voltios hasta 132 kV; las corrientes nominales, desde unos pocos mA hasta 6 kA y las capacidades de ruptura alcanzan en algunos casos los 200 kA.
La producción anual de fusibles supera los 30 millones de unidades, mientras que en Argentina se utilizan aproximadamente 300.000 unidades anuales. Una industria de tamaño medio puede tener instalados algunos centenares de fusibles y en un automóvil moderno pueden encontrarse en uso entre 40 y 60 fusibles. La mayoría de los equipos electrónicos poseen al menos un fusible. Sus tamaños pueden ser tan pequeños como la cabeza de un fósforo de madera, y en el otro extremo, o sea para aplicaciones de alta tensión y con alta potencia de corto circuito, se encuentran fusibles cuyo peso ronda los 20 kilogramos.
Las estadísticas de producción a nivel mundial indican el crecimiento constante del mercado. Para algunos tipos de fusibles el crecimiento es muy elevado, como es el caso de los dispositivos para circuitos electrónicos de baja potencia y los elementos para uso en automóviles. En cambio, para los fusibles tradicionales (baja y media tensión, y alta capacidad de ruptura) se estima un crecimiento con menor velocidad, del orden del crecimiento de los sistemas eléctricos, que ronda el 3% anual.
El principio de funcionamiento del fusible es muy simple: se basa en intercalar un elemento más débil en el circuito, de manera tal que cuando la corriente alcance niveles que podrían dañar a los componentes del mismo, el fusible se funda e interrumpa la circulación de la corriente. Que el elemento fusible o eslabón débil del circuito alcance la fusión no implica necesariamente que se interrumpa la corriente, siendo esta diferencia la clave para entender la tecnología involucrada en el aparentemente simple fusible.

A lo largo de los años han ido apareciendo fusibles para aplicaciones específicas, tales como proteger líneas, motores, transformadores de potencia, transformadores de tensión, condensadores, semiconductores de potencia, conductores aislados (cables), componentes electrónicos, circuitos impresos, circuitos integrados, etc. Estos tipos tan diversos de fusibles poseen características de selección muy distintas, lo que hace compleja su correcta selección.
Este rango tan amplio requiere que el usuario de fusibles posea un importante nivel de conocimientos, que no es fácil de adquirir por la falta de material informativo de fácil acceso.
Hay que considerar otro factor importante, que es la existencia de fusibles respondiendo a normalizaciones de diversos países. Cuando se habla de los sistemas de distribución de energía eléctrica, se emplean en nuestro medio fusibles de alta potencia respondiendo fundamentalmente a normas europeas, pero para la distribución de media tensión y baja potencia, se emplean elementos afines a la normalización norteamericana.
La normalización europea, en la actualidad prácticamente se ha unificado en las normas IEC (International Electrotechnical Commission), pero en nuestro medio todavía hay infinidad de dispositivos instalados cuyo origen proviene de tiempos anteriores a la unificación. La situación se empeora mucho cuando se hace referencia a los fusibles instalados en equipos, ya sean industriales, electrodomésticos o electrónicos, pues los dispositivos responden a las normas del país de origen del equipamiento.
El abanico de posibilidades de fusibles para equipos de baja tensión es prácticamente ilimitado, pudiendo afirmarse que cada país del mundo está representado con algún fusible. Frente a esta situación, la reposición del fusible es muy difícil de lograr, por lo que debe recurrirse al reemplazo por el dispositivo de características tan parecidas como sea posible, lo que nuevamente requiere de un buen nivel de conocimientos por parte del usuario.
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fallas electricas

Concepto de falla eléctrica

Una falla eléctrica es un evento anormal que provoca el mal funcionamiento de un circuito eléctrico y algunas veces ocasiona el corte del suministro de energía en una vivienda. En efecto, un corte de suministro o apagón también está considerado como una falla eléctrica.
Las fallas eléctricas pueden producir daños a la instalación y componentes eléctricos que la conforman; pero también pueden provocar accidentes fatales para las personas; las mismas que van desde quemaduras graves hasta una electrocución o choque eléctrico.

Concepto de falla eléctrica

Una falla eléctrica es un evento anormal que provoca el mal funcionamiento de un circuito eléctrico y algunas veces ocasiona el corte del suministro de energía en una vivienda. En efecto, un corte de suministro o apagón también está considerado como una falla eléctrica.
Las fallas eléctricas pueden producir daños a la instalación y componentes eléctricos que la conforman; pero también pueden provocar accidentes fatales para las personas; las mismas que van desde quemaduras graves hasta una electrocución o choque eléctrico.

Las causas de las averías eléctricas son variadas y complejas; a continuación vamos a poner por orden de incidencia a los agentes que más generan este tipo de eventos:
  • El ser humano
  • Fenómenos meteorológicos
  • Artefactos en mal estado
  • El clima
  • Los animales
Como podemos apreciar el ser humano encabeza la lista de responsabilidad entre los causantes de los fallos eléctricos, ninguna novedad hasta aquí; pues es bastante común que muchas personas encarguen las instalaciones eléctricas a personal no capacitado para realizar esta tarea.
De esa labor improvisada se encargan gasfiteros, albañiles y pintores; ojo no tenemos nada contra ellos, pero consideramos que el refrán “zapatero a sus zapatos” aplica al momento de decidir que tipo de personal va a realizar una instalación eléctrica.

Los materiales

La mayoría de fallas eléctricas domiciliarias se producen debido a la informalidad en el sector de la construcción de instalaciones; este es un problema recurrente no sólo en el Perú, sino en la mayoría de países latinoamericanos.
El empleo de materiales de mala calidad (chinos), conexiones clandestinas, robo de energía, instalaciones improvisadas, personal no calificado o sin experiencia para realizar las instalaciones, están entre las causas principales.

En el caso de los materiales hay que tener especial cuidado al momento de adquirirlos; por ejemplo el mercado está repleto de marcas chinas de cables que son aleación de cobre con aluminio. Éstos cables con el tiempo se sulfatan, se oxidan y se queman; asimismo al no ser 100% de cobre son más frágiles y soportan menos corriente que un cable genuino de las mismas especificaciones.
Otro factor más que puede desencadenar este tipo de problemas eléctricos son las instalaciones antiguas y la falta de mantenimiento; el cableado y componentes de las mismas envejecen y con ello pierden su capacidad dieléctrica (deterioro del aislante).

Consecuencias

Las consecuencias de las fallas eléctricas pueden ser desde leves o moderadas hasta muy graves. Entre las leves podemos mencionar a los cortes temporales de energía; elevación del consumo eléctrico (importante si eres de los que ahorra energía) y mal funcionamiento de artefactos. Entre las graves y peligrosas que se dan podemos mencionar la electrocución de personas y los incendios.
En los últimos años los incendios ocasionados por cortocircuitos en el Perú se han incrementado en más de 70%; las muertes por electrocución también se han elevado de manera considerable. Por ello es importante tomar conciencia de prevención, respeto por la electricidad y realizar instalaciones que cumplan con normas de seguridad mínimas.

En teoría las fallas eléctricas no deberían provocar los daños que aquí se describen; para ello existen elementos de protección y control que evitan que una avería eléctrica pase a mayores; pero como ya hemos indicado, un mal diseño y la mala praxis al momento de hacer una instalación, es lo que desencadena las consecuencias fatales.

Tipos de fallas eléctricas

Las fallas eléctricas más comunes son:
  • Cortocircuitos
  • Fugas eléctricas
  • Falsos contactos
  • Sobrecargas
  • Falla de suministro
No obstante, hay otras clasificaciones que se le dan a este tipo problemas eléctricos tal como se detalla a continuación:

Fallas primarias

Las fallas primarias son las que se presentan en las líneas de distribución y transporte de la energía eléctrica, transformadores; esto aplica más que nada para sistemas de alta y media tensión.

Fallas secundarias

Las fallas eléctricas secundarias son las que se dan como consecuencia del fallo de los elementos de control, errores de conexión y mal diseño de un sistema eléctrico.

Detección y solución de fallas eléctricas

Para detectar fallas eléctricas se necesita tener conocimientos de electricidad básica y corriente eléctrica; y por tanto el manejo y uso de instrumentos de medición. Sin embargo utilizando un poco el criterio y el sentido común se podría encontrar y solucionar muchas de ellas.

Instrumentos

El instrumento básico para detectar y reparar averías eléctricas es el multímetro; el cual cuenta con las funciones necesarias para medir las tres magnitudes eléctricas principales de los circuitos eléctricos que son: la corriente, la resistencia y el voltaje. Con el multímetro se puede solucionar fallas de fugas eléctricas, cortocircuitos y circuitos abiertos.

En teoría las fallas eléctricas no deberían provocar los daños que aquí se describen; para ello existen elementos de protección y control que evitan que una avería eléctrica pase a mayores; pero como ya hemos indicado, un mal diseño y la mala praxis al momento de hacer una instalación, es lo que desencadena las consecuencias fatales.

Tipos de fallas eléctricas

Las fallas eléctricas más comunes son:
  • Cortocircuitos
  • Fugas eléctricas
  • Falsos contactos
  • Sobrecargas
  • Falla de suministro
No obstante, hay otras clasificaciones que se le dan a este tipo problemas eléctricos tal como se detalla a continuación:

Fallas primarias

Las fallas primarias son las que se presentan en las líneas de distribución y transporte de la energía eléctrica, transformadores; esto aplica más que nada para sistemas de alta y media tensión.

Fallas secundarias

Las fallas eléctricas secundarias son las que se dan como consecuencia del fallo de los elementos de control, errores de conexión y mal diseño de un sistema eléctrico.

Detección y solución de fallas eléctricas

Para detectar fallas eléctricas se necesita tener conocimientos de electricidad básica y corriente eléctrica; y por tanto el manejo y uso de instrumentos de medición. Sin embargo utilizando un poco el criterio y el sentido común se podría encontrar y solucionar muchas de ellas.

que es AC/DC


AC (Alterna) DC (Continua)


La electricidad es un tipo de energía transmitida por el movimiento de electrones a través de un material conductor. Por ejemplo, los metales son materiales con alta conductancia eléctrica y permiten el movimiento de electrones fácilmente. Dentro del material conductor los electrones se pueden mover en uno o en dos sentidos, en función de lo cual se pueden distinguir dos tipos de corriente, la continua y la alterna.

Cuándo el flujo de corriente eléctrica se da en un solo sentido, se conoce como Corriente Continua, generalmente designada con las siglas DC, siglas que vienen del inglés Direct Current, o aunque con menos frecuencia con las siglas del español CC.
Cuándo el flujo eléctrico se da en dos sentidos se conoce como Corriente Alterna y se designa generalmente con las siglas AC, del inglés Alternating Current, o con las siglas en español CA. La mayoría de redes eléctricas actuales utilizan corriente alterna, mientras que las baterías, pilas y dinamos generan corriente continua.


La corriente continua o DC:

En la naturaleza la electricidad es relativamente rara si se compara con lo cotidiana que es en nuestra vida, sólo es generado por algunos animales y en algunos fenómenos naturales como los rayos.

En la búsqueda de generar un flujo de electrones artificial, los científicos se dieron cuenta de que un campo magnético podía hacer a los electrones fluir a través de un cable metálico u otro material conductor, pero en un solo sentido, pues los electrones son repelidos por un polo del campo magnético y atraídos por el otro. Así nacieron las baterías y generadores de corriente eléctrica continua, un invento principalmente atribuido a Thomas Edison en el siglo XIX, el mismo del que se debate si inventó o no la bombiila. 


como se instala un tomacorriente

Veremos ahora como instalar un tomacorriente. Los tomacorrientes se denominan como polarizados y no polarizados, estos son los más utilizados en una normal, aunque para proteger todos los aparatos conectados lo ideal es que se colocquen tomacorrientes polarizados.

 NOTA: No olvides desconectar la energía eléctrica, así evitaras acccidentes y trabajaras con toda confianza

 Tomacorriente polarizado: Este tomacorriente se caracteriza por tener tres puntos de conexión, el de fase, vivo o positivo, el neutro o negativo y el de tierra fisica, es muy importante el uso de estos tomacorrientes. A la derecha un ejemplo de la espiga que se utiliza.

Para la instalación de un tomacorriente se debe de desmontar el toma anterior quitando los tornillos que aseguran el tomacorriente a la caja, luego, aflojar los tornillos que aseguran los cables y colocar el nuevo. Si es una instalación nueva, primero debemos de colocar los cables dentro del tubo y proceder como se hizo con los interruptores, ver Interruptor simple e Interruptor múltiple. En el caso de los tomacorrientes los cables se conectan al positivo y negativo de la instalación directamente.
 En la figura puede verse que debemos de conectar tres cables para instalar un tomacorriente polarizado:
CAFÉ, NEGRO O GRIS: Este debe de conectarse a la línea de fase, viva o positiva de la instalación eléctrica.
AZUL O BLANCO: Este debe de conectarse a la línea neutra o negativa de la instalación eléctrica.
VERDE O VERDE CON AMARILLO: Este corresponde a la tierra física instalación eléctrica. NOTA: ver  arriba del código de colores.
En el caso de un tomacorriente no polarizado se deben de conectar dos cables:

ROJO: Este debe de conectarse a la línea viva o positiva de la instalación eléctrica.
NEGRO: Este debe de conectarse a la línea negativa de la instalación eléctrica.
Para una instalacion nueva seguir los pasos indicados en Interruptor simple e Interruptor múltiple.

No hemos utilizado símbolos para estos casos ya que lo que se pretende es enseñar de forma simple como instalar tomacorrientes. Esperamos que este tutorial sea de utilidad para los estudiantes y personas que deseeen hacer sus propias instalaciones eléctricas.
Resultado de imagen para tomacorriente polarizado

como se instala un tomacorriente polarizado

  Tomacorriente polarizado : Este tomacorriente se caracteriza por tener tres puntos de conexión, el de fase, vivo o positivo, el neutro o...